Rúcula
Hoy os presentamos una hortaliza diferente, una hortaliza realmente especial, no solo por su peculiar y agradable sabor, sino por sus grandes ventajas para nuestro organismo. La rúcula! También conocida con nombres como oruga, ruqueta, arúgula y jaramago.
Se trata de una hortaliza muy común en la zona del Mediterráneo que se consume al menos desde la época romana como verdura por sus propiedades medicinales y nutritivas. Su uso típico es en ensaladas, sándwiches o pizzas, pasta, pero se puede utilizar de muchas formas diferentes en otros platos.
En cuanto a sus propiedades podemos destacar estos beneficios:
En la lucha contra el cáncer
La rúcula contiene una sustancia llamada glucosinolato, muy efectiva en la lucha contra determinados tipos de cáncer (cáncer de páncreas, cáncer de mama, cáncer colorrectal). Además estudios recientes han sugerido que los compuestos que contienen azufre (es decir, de sulforafano) que dan a las verduras crucíferas ese sabor un poco amargo son también los que les aportan su poder para combatir el cáncer (tanto de esófago, próstata, páncreas o melanoma). Y es que este compuesto puede inhibir la enzima histona desacetilasa (HDAC), involucrada en la progresión de las células cancerosas
En la lucha contra el envejecimiento
La rúcula posee un gran poder desintoxicante, al igual que la col y el brócoli. Por su alto contenido en ácido fólico y vitamina B, evita que el cerebro envejezca prematuramente y también evita inflamaciones repetitivas.
Para nuestra salud en general
Contiene vitamina K, que ayuda a evitar enfermedades cardiovasculares y ayuda a que nuestro organismo asimile el calcio que tiene la rúcula.
Ayuda a una mejor digestión y nos da la impresión de estar llenos, pero con una ingesta de calorías muy baja.
Mejora nuestra resistencia a enfermedades, fortaleciendo nuestro sistema inmunitario gracias a la vitamina C y compuestos sulfurados.
