Hinojo dulce

VERDURAS QUE VAN, VERDURAS QUE VIENEN

En ocasiones hablamos acerca de las verduras «habituales», como las más cercanas a nuestra dieta clásica, en cambio hay otras que nos pueden resultar un tanto extrañas, incluso exóticas, pero que llevan siglos entre nosotros, y que formaron parte de nuestra dieta básica y ahora las hemos dejado de lado. En muchas ocasiones valoramos más lo que viene de fuera por lo novedoso y desdeñamos estos productos que cultivamos en nuestras latitudes.

Hoy os traemos al hinojo dulce, una selección hecha en el norte de Italia del hinojo silvestre, ese que crece en los márgenes de los caminos y en los taludes de nuestros campos. Se trata de una verdura muy aromática y de gran versatilidad, por ello utilizada en muchas aplicaciones culinarias, sobre todo para aromatizar y acompañar platos de pescado, carnes, sopas, ensaladas, salsas y cremas (con carlota, con puerro o con pera y plátano). Se puede utilizar tanto el bulbo como las hojas y tiene un gusto dulzón que recuerda al anís. Los bulbos se pueden encontrar como ingrediente dentro de un puré o crema, o se pueden hacer a la parrilla o salteados. Las hojas se utilizan para aromatizar platos y guisos. Tiene propiedades digestivas: abre el apetito, evita flatulencias y dolores de estómago. Además tiene muchísimos componentes diuréticos. Una verdura nuestra en origen, que tenemos en desuso, actualmente en auge en centro Europa, y que sin duda será habitual verla en nuestros platos más elaborados en no muchos años.